2022, pleno cuarto mandato presidencial kirchnerista. Los votó la mayoría y volvieron potenciados para hacer el mal cada vez mejor. Peores que un ciclón. Al borde de la furia por tamaña agresión y atentado a la razón ¿hasta cuándo voy/vamos a poder soportarlos sin estallar? Mientras, el país se sigue derrumbando, desmoronando lentamente, ladrillo a ladrillo, abandonando a cada vez más ciudadanos bajo los escombros. Pero nadie se hace cargo. Como dice el filósofo polaco Ladislaw Lem: “en un alud ningún copo de nieve se asume responsable”(fin de la metáfora) ¿HASTA CUANDO? Acostumbrados, resignados y sometidos, gran parte de los argentinos están entrampados en la creencia de que algo va a cambiar. Efectivamente, algo va a cambiar, para que todo siga igual. ¡BASTA, juicio y castigo a los culpables ya! Hagamos de la interrupción un camino nuevo